En una maniobra que presagia un reforzamiento exhaustivo de la vigilancia digital, el Departamento de Estado de EE. UU. ha decretado la suspensión sine die de la programación de nuevas entrevistas para visados estudiantiles, a la espera de la implementación de protocolos perfeccionados para el escrutinio de la actividad en redes sociales, si bien esta moratoria no afecta a aquellos solicitantes cuyas entrevistas ya habían sido preestablecidas. Esta directiva, formalizada mediante un cable suscrito por el Secretario de Estado Marco Rubio, conmina a las secciones consulares a abstenerse de concertar nuevas citas para visados de estudiantes hasta la promulgación de las directrices que regirán la ampliación de la revisión de perfiles en redes sociales; una decisión que evoca la anterior represión ejercida por la administración Trump contra estudiantes internacionales, incluyendo la revocación de la potestad de la Universidad de Harvard para matricular estudiantes extranjeros y la anulación del estatus legal de miles de estudiantes internacionales ya radicados en EE. UU., mientras que la actual administración Biden ha perpetuado la política de análisis exhaustivo de las cuentas en redes sociales de los solicitantes de visados, de manera que una prórroga indefinida de la suspensión en la programación de visados estudiantiles podría acarrear la interrupción de los planes de matriculación de estudiantes en los semestres estival y otoñal, y una merma en la inscripción de estudiantes internacionales podría impactar negativamente en los presupuestos universitarios.