Estados Unidos y Europa tienen un problema con el comercio. Estados Unidos quiere poner un impuesto grande a los productos de Europa. El presidente de Estados Unidos no está contento porque Europa vende más cosas a Estados Unidos de las que compra. Europa dice que, si se cuentan los servicios de internet, ellos venden más. Para arreglar esto, Europa puede comprar más gas a Estados Unidos o gastar más dinero en defensa con empresas de Estados Unidos. También puede bajar el impuesto a los coches de otros países. Pero hay problemas con las reglas de Europa para la comida y con los impuestos. Es difícil encontrar una solución. Los expertos dicen que si hay un impuesto grande, la economía de Europa será un poco más pequeña el próximo año.